La habitación vacía de un hotel de la localidad californiana de San Luis Obispo es escenario de un extraño suceso.
Suena el teléfono en el mostrador de recepción del Paso Robles Inn, pero cuando el conserje coge el teléfono, no hay nadie al otro extremo de la línea. Estas llamadas fantasmales llevan ocurriendo desde hace semanas, de acuerdo con la dirección del hotel. Si hacemos caso de lo que relatan los empleados del Paso Robles Inn, éstos se encontrarían bastante alarmados ante la presencia de un fantasma que estaría habitando el establecimiento.
Al principio, la dirección atribuyó estas llamadas a una avería en la centralita del hotel. Sin embargo, la situación comenzó a precipitarse cuando el presunto fantasma llamó al número de la policía. Cuando llegaron los agentes, la habitación, cuya puerta requiere de una llave electrónica para ser abierta, se encontraba completamente vacía. Esta llamada no puede ser achacable a un accidente, ya que para llamar a la policía desde una habitación hay que pulsar las teclas 8 y 0 antes del número 911, según declaró el director general del establecimiento Paul Wallace. Los empleados creen que el fantasma puede ser un antiguo trabajador, llamado Emsley que murió de un ataque al corazón durante un incendio. En cualquier caso, resulta especialmente curioso que las llamadas sean especialmente numerosas cuando hay mal tiempo, según ha confirmado el oficial de la policía de Paso Robles Terry Johnson.
La dirección del hotel ha recurrido a la compañía telefónica Pacific Bell, que no ha encontrado ninguna avería en la línea. De hecho, los operarios prácticamente desmontaron todo el sistema sin encontrar ninguna anomalía. Mike Childs, jefe de mantenimiento del establecimiento, está especialmente desconcertado por el misterio de las llamadas telefónicas.
Las misteriosas llamadas se reciben en el mostrador de recepción varias veces al día, y Childs no se convenció de que no había avería alguna hasta que no intervinieron los técnicos de la compañía telefónica. Lo que terminó de convencerle fue el presenciar él mismo una de estas llamadas estando en la habitación, la cual se produjo sin que se descolgase el teléfono. Incluso se produjo una de estas llamadas mientras el responsable de mantenimiento sostenía el auricular en su mano.
Cuando se descuelga el teléfono en recepción, se puede escuchar al otro lado de la línea una especie de crujidos.
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