La historia transcurre en un auto, después de una fiesta de graduación (aquí las versiones cambian) dos jóvenes enamorados van a un mirador, estos típicamente después de esta fiestas se ponen cariñosos, por ello ella comienza a hacerle sexo oral al joven pero la niña era epiléptica y mientras lo hacía le dio un ataque epiléptico lo cual el pobre joven no pudo huir, Su miembro ha quedado atrapado en la mandíbula de su novia. Para cuando logra zafar, el desastre es total: ha perdido buena parte de su hombría.
¿Puede esto suceder?
Para Armando Cortines, gineco-obstetra del Hospital La temible y terrible historia de la epiléptica Clínico de la Universidad de Chile, esta historia puede ser verídica, ya que normalmente la persona con epilepsia experimenta una contracción involuntaria de todos sus músculos -incluyendo la mandíbula- durante los ataques. De hecho, por eso a los epilépticos les ponen un paño en la boca cuando sufren sus ataques, para que no se muerdan la lengua. Lamentablemente, la chica en cuestión no tenía un paño a mano.
Conclusión: Aterradoramente posible.
Nota: Este es un mito urbano chileno, con su publicación no pretendemos desprestigiar o burlarnos de las personas que sufren esta enfermedad.
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